Sin lugar a duda, las invitaciones de bodas junto al traje de novia son los protagonistas de la ceremonia nupcial. Por eso es importante tomar en cuenta el color y diseño de la misma
Por Ysabel Parra
Las invitaciones son uno de los principales detalles de una boda. Su fina y delicada presentación es vital para convocar a los invitados, que te acompañarán en ese histórico día. Por eso es muy importante tenerlas a mano porque en ellas se especifican todos los detalles del acontecimiento.
Para la experta en etiqueta social, Grisel Rivera las invitaciones de bodas se deben entregar seis meses antes, porque así facilita que los invitados que viven fuera del país puedan organizar sus agendas.
Rivera manifiesta que otro de los detalles de las invitaciones de boda es la entrega. Es mucho más personal entregarlas en mano, claro si es posible. También se pueden enviar vía correo por servicio de mensajería. En cuanto a los colores, explica que existe una gran variedad de tonalidades como el blanco, beige y gris claro.
“El color de las invitaciones queda al gusto de los novios. Si lo que deseas transmitir es delicadeza puedes elegir tonalidades pastel, rosa, menta y celeste, siendo estos algunos de los colores románticos por excelencia”.
Un poco de historia...
El origen de las invitaciones de boda s remonta desde la Edad Media. En esa época, un pregonero recorría las comunidades convocando a los invitados a la ceremonia.
Por muchos siglos, en Europa el pregonero fue el encargado de hacer público y notorio todo lo que se quería hacer saber a la población de una localidad, el origen de esta figura se remonta hasta la antigua Roma.En esa época, en las plazas más importantes los lugareños convocaban a sus habitantes para transmitirles todo tipo de noticias y eventos, entre los que se encontraban las celebraciones de bodas.
La especialista en etiqueta social, Grisel Rivera destaca que es muy importante entregar la invitación personal. Fotografías: Canva y Grisel Rivera.
Comments