Educado, atento y sencillo son solo algunos de los atributos que adornan al afamado diseñador dominicano, Sully Bonnelly. Su inigualable trayectoria lo coloca como uno de los más notables de la moda Latinoamericana en Nueva York. Bonnelly es un gran artista, además de su exitosa carrera como creador de moda es un gran coleccionista de arte contemporáneo Latinoamericano.
Los grandes reconocimientos y su impecable trayectoria lo mantienen colocado como un referente de la alta costura. En cada una de sus colecciones, Bonnelly destaca sus orígenes caribeños, sobre todo la diversidad de colorido de su amada República Dominicana.
Aunque desarrolló su prolífera carrera en Nueva York, Bonnelly siempre se mantiene unido a sus raíces caribeñas, de las cuales se siente orgulloso. Y como un apasioando de su oficio, relata que las colecciones de Jumbo están inspiradas en el colorido de la cultura dominicana, en la que prevalece un toque fresco de color y variedad de patrones.
“Siempre estoy trabajando en diferentes propuestas y desde hace varios años junto a la tienda Jumbo en República Dominicana hacemos una colección de trajes de baños en la que diseñamos colecciones exclusivas para ese mercado”.
Con gran entusiasmo comenta que la idea de esta colección es que la combinación de coloridos y estampados sean distintos pero a la vez armoniosos entre sí. Estampados caribeños como el de la flor de cayena y follaje tropical, junto a patrones geométricos permiten que cada una de las piezas funcione tanto en conjunto como de manera individual.
El profesional de la alta costura no para de crear, continuamente trabaja en diferentes proyectos vinculados al mundo de la moda. Revela que trabaja junto a su esposo Robert Littman una colección de vestidos tradicionales mexicanos, que viaja conjuntamente con la colección de Gelman, propiedad de Littman.
Bonnelly es el curador de la colección de ropa mexicana que está mayormente enfocada en el traje de Tehuana, que le gustaba a la famosa pintora Frida Kahlo. Para la presentación de alguna de las piezas, creó faldas con un estilo Frida Kahlo.
Frida vestía con un estilo de mujer libre, que veneraba las raíces vistiendo con una gracia sin precedentes trajes típicos regionales de los atuendos prehispánicos.
Una vida de reconocimientos
Estudiaba arquitectura en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y en 1980 viajó a Nueva York a estudiar diseño en la prestigiosa escuela de diseño, Parsons School of Design. Inició su carrera en el mundo de la moda como asistente del maestro Oscar de la Renta.
El profesional del diseño también trabajó como diseñador para las casas de Bill Blass y Eli Tahari. En 2001 trabajó como director creativo de Citrine, una colección de ropa deportiva contemporánea. En 2003 lanzó la colección Sully Bonnelly Bridal. Por su destacada carrera en 1999 recibió el Golden Coast Award, un prestigioso premio de moda en Chicago.
En 2001 fue elegido miembro del Consejo de Diseñadores de Moda de América (CFDA) En 2005 con motivo de la celebración del Mes de la Herencia Hispana, el gobernador de Nueva York, George Pataki, le entregó un reconocimiento.
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